12.30.2011

Créeme.

       No tengo palabras. No sé qué decir. Silencio. Pero no quiero quedarme callada. No. Hay demasiadas cosas que quiero hacerte saber.
...
       Lo siento, empiezo otra vez. Me he equivocado, no es que yo no tenga palabras.
No las encuentro,
no las hay.
...
       Perdona, comienzo una vez más. Vuelvo a estar equivocada.
Sí que las hay.
Sí, y muchas.
Pero sólo son palabras.
Palabras.
Palabras.
Simples palabras.
Amor, caricias, besos, sonrisas, pareja...
Y a mí eso no me vale,
no es suficiente.
No expresan lo que yo siento,
son incompletas.
Son frías y superficiales.
Son comunes, son sencillas.
       
       Escúchame, lo que yo siento por ti no tiene nombre. No tiene nombre, ni precio, ni nada que se le parezca. Es algo tan intenso que no me bastan las sonrisas, a veces necesito incluso llorar. Pero lloro de felicidad, lloro de la alegría que me da tenerte conmigo, de todas las cosas que me dices, de que me quieras tanto como yo a ti. De hecho, es por eso por lo que mis lagrimas te parecen tan dulces, estoy segura. También estoy segura de que esto te parecerá una tontería; ¿Llorar por esto? ¿Llorar por estar contenta? ¿Llorar por simplemente quererte? Créeme, sí.

       
Tequiero.

12.15.2011

Nadie como tú.

Nadie como tu para hacerme reír,
nadie más que tú sabe tanto de mí, 
nadie como tú es capaz de compartir
mis penas, mi tristeza, mis ganas de vivir.

Tienes ese don de dar tranquilidad,
de saber escuchar,
de envolverme en paz.
Tienes la virtud de hacerme olvidar
el miedo que me da mirar la oscuridad.

Solamente tú lo puedes entender,
y solamente tú te lo podrás creer.


Te quiero.

11.26.2011

No lo hay.

No hay nada mejor que el cosquilleo que siento al verte,
 que disfrutar como una niña pequeña cada vez que me sonríes, 
que la alegría que siento cuando sé que no voy a perderte, 
que la cara de lela que pongo cuando te miro embobada, 
que lo feliz que me siento cuando me abrazas, 
que esa sonrisa tonta que se me escapa cuando pienso en ti.

Nada mejor que cuando me duermo pensando en cada uno de los momentos que he pasado a tu lado
y en todos los que quedan por venir,
que tus caricias y tus besos.
No,
no hay nada más bonito que eso.
TE QUIERO.


11.21.2011

Eres tú o nadie.

          Dicen que cuando te enamoras de una persona lo haces en sólo dos segundos, no se tarda más.
          Sólo cuando estás enamorada de verdad sientes que es imposible olvidar su olor, cada momento que pasas junto a él, cada sonrisa que únicamente él puede sacarte, cada una de las veces que te dice que te quiere. Porque aunque te lo diga a menudo, te encanta oírlo una y otra vez.
          Puede que a lo largo del día diez personas te llamen guapa y que cinco te digan que te quieres, pero a ti sólo te importa esa vez en la que él te lo llama y esa otra en la que él te dice que te quiere más que a nadie.
          Cada día sientes que le sigues queriendo tanto o más como en aquellos dos segundos en los que te enamoraste de él. Porque él es el único capaz de sacarte una sonrisa hasta en los peores momentos, el único capaz de hacerte volar con tan sólo un beso, ése por el que darías tu vida si hiciera falta, porque al fin y al cabo, sabes que es él o nadie.

11.12.2011

Especial.

Ese sentimiento irracional que sientes cuando te besa. Esa alegría en estado puro cuando lo tienes cerca. Cuando sientes que cada minuto que estás junto a él es menos de una milésima de segundo, cuando las tardes y noches a su lado pasan como rayos. Cuando te levantas y sientes la necesidad de saber qué es de él. Aquella llamada a altas horas de la noche, cuando te dice que duermas bien con voz dormida, o cuando simplemente se despide con un “te quiero”.



10.12.2011

Mi suerte:

          Para algunos la suerte es que te toque la lotería, que el quipo contrario marque de rebote o encontrase una moneda de dos euros por la calle. Para mí la suerte es otra cosa. También es darte cuenta de que existe algo que te inspira, que te alivia, algo con lo que te sientes realmente bien y que no necesitas nada más, algo que realmente te gusta. Es saber que existe alguien por quien te levantas con una sonrisa, alguien que te hace sentir que sólo importas tú. Para mí la suerte es tenerte cerca, saber que estás ahí, besarte, necesitarte o quererte cada día un poco más.

Sí, eres lo que yo entiendo por suerte.




10.04.2011

No, no lo quiero.

          Yo no quiero otros besos, otros sueños, ni otras manos acariciando mi pelo. No me gustaría una fecha distinta, con “te quieros” diferentes dichos por una voz distinta a la suya. No quiero oír otros cumplidos, suspiros o respiraciones cerca del oído, ni vivir una historia diferente a la que tengo con él desde abril. No, no tengo una vida perfecta, pero no la necesito, porque si algo es perfecto es mi felicidad desde que estoy con él, y no quiero otra cosa que no sea esa.



9.28.2011

Un 29.

          Hoy, jueves. Septiembre, día 29. Se cumplen ocho meses desde que nos conocimos. Un 29 de enero. Aquella tarde, en aquella casa, en aquella habitación. Nos reímos a carcajadas, durante largos minutos, y al menos las mías fueros de las más sinceras en mucho tiempo.

          Si te digo la verdad, no sé lo que pensé cuando te vi. Ya sabía que existías, me habían hablado un poco de ti, aunque no le di importancia. Aun así, ya sabes qué bien se me dan las fechas, y te felicité por tu cumpleaños que había sido tan sólo unos días antes. Pero, al poco de unas horas (después de haber empezado por grabar un trabajo para clase y acabar bailando un anuncio), sí que sé cual fue el recuerdo que me llevé a casa de ti; que eras único, que eras especial.

          Pero eso no fue nada comparado con lo que vino después. Nada más lejos, al día siguiente nos pasamos seis horas hablando, ¡y se dice rápido! E incluso viniste a mi concierto a los poco días. No sé si tú también lo pensaste, pero había algo entre nosotros dos, algo se puso en marcha. Cogimos confianza al momento, algo que nunca me había pasado, y ésta se incrementó a medida que el tiempo pasaba, por pasarnos tantas horas pegados al teléfono.

          Tampoco sé en qué momento o en qué lugar empecé a sentir algo por ti, o si fue poco a poco a lo largo de las semanas. Delo que sí estoy segura es de que te quiero, y me da igual cómo o cuándo haya empezado a pasar. Sólo me importa que sigas a mi lado, quererte y que me quieras, hacerte feliz. ♥



9.26.2011

Ella.

    Quiero dedicar esta entrada a alguien muy importante para mi, alguien que me ha acompañado siempre en los buenos y en los malo momentos, alguien con quien no he sido capaz de parar de reír a carcajadas. Ella ha sido quien me ha regalado este libro, acompañado de su larga historia que sólo nosotras conocemos, y me lo ha dedicado tan tiernamente:
          

         " Por esos días inolvidables que hemos pasado juntas:
          
          Te regalo este libro porque quería encontrar un excusa para decirte que tú has formado una gran parte de mi vida, en la que todos mis recuerdos son estupendos. Llegará un momento en el que ya no nos podamos ver, pero aún así, siempre que vea la colección de libros de NARNIA, y resalte el hueco que ocupaba este libro, me acordaré de ti, y ese hueco se rellenará de una gran amistad que nunca se acabará.

Porque los bueno momentos
son los mejoren recuerdos. 

Maider. "



9.13.2011

Por mucho más.

          La verdad es que no sé cómo empezar. Te diría tantas cosas... Quizás con un "Buenos días mi amor" es suficiente. ¿Y ahora? Como tú bien has dicho, "decir que contigo estoy bien es poco, decir que estoy mal de locos". ¡Y qué razón tienes!
          Pero esta vez no te escribo para contarte lo mucho que te quiero. Hoy quiero pedirte perdón, y darte las gracias también.
         
          Perdón por todo esos días en los que no hago más que meter la mata, un error tras otro. Perdón por tratarte de tal manera que, después de haber tenido un día torcido, me siento más culpable por haberte hablado así. Perdóname si alguna vez te he ofendido, decepcionado, o incluso herido sin darme cuenta. Perdón por que a veces se me olvida la suerte que tengo.
          Y es que me pongo a pensar en todas esas cosas que me dices, tan dulces, sinceras, y con tanto amor. En todas las miradas que me dedicas, donde me pierdo en tus ojos, fascinada, y ya no sé ni de qué estábamos hablando. Pienso en todos los abrazos que me has dado, tan reconfortantes como ninguno, en todas las caricias, y cómo no en todos los besos. Tus labios, calentitos, suaves, que me crean adicción, esos que nunca dejaría de rozar con lo míos.
          Y por todo eso, por todas las sonrisas que me has sacado, por todo lo que nos hemos reído, por todas esas tardes juntos, por ser mi amigo y por mucho más, GRACIAS.

Gracias por quererme,
por dejarme estar contigo.
Gracias por ser tú.

8.15.2011

Sin duda alguna.

        Yo no elegí sentir esto, no elegí quererte así, y tampoco elegí sentirme la persona más afortunada del mundo. no escogí el día 15, ni el mes de abril, simplemente apareció y se convirtió en una fecha para guardar en el cajón de los buenos recuerdos. No escogí que te cruzaras conmigo en mi camino, no elegí pensar en ti cada segundo, tener tu imagen fija en mi cabeza, ni tampoco elegí que tú fueras mi destino.
        No, no me dieron a elegir esto, ni el quererte tanto, pero sin duda, si me hubieran dado a elegir, lo habría escogido tal y como lo estamos haciendo.


Te quiero.

8.08.2011

   Te quiero, sí, ya sé que eso se queda demasiado corto.

    Puede resultar repetitivo decir que nadie me ha hecho sentir como tú, pero es la verdad. ¿Qué quieres que le haga? Es que me encanta cada pequeña parte de ti, cada cosa que me dices, aunque para algunos resulte una tontería, me encantan tus besos, todos esos abrazos que me has dado cada día y que me han hecho sentir tan especial.

    Me encanta estar contigo dando vueltas por cualquier sitio, todas esas tardes únicas e irrepetibles que he pasado a tu lado, cada caricia, cada mirada… Me gusta que la gente nos mire y se muera de envidia al vernos, porque sí, me siento afortunada al tenerte a mi lado, por saber que estás ahí y que no te vas a ir…

    Te quiero, te quiero, te quiero. Y nunca me cansaré de repetírtelo hasta que no te quepa la menor duda.




7.29.2011

    Me encanta que me llames "princesa", adoro que me digas "te quiero" al oído, dulcemente. Me encanta cuando me abrazas y me besas sin motivo, me enamoras cuando me dices que soy lo que más quieres. Me gusta que me quieras tal y como soy, con todos y cada uno de mis defectos. Adoro que me sonrías cuando me pico por tonterías y que vengas y me beses a la fuerza aunque yo siga aún picada.
Me gustas tú, tal y como eres.




7.22.2011

Te amo sólo por un par de cosillas... nada más.

No se me ocurre ni una sola cosa que me guste de ti, excepto...


Tu sonrisa torcida, tu mirada burlona, tus manos rozando las mías, tu forma de andar. Me gusta cuando me miras, te miro y apartas la vista, me gusta cuando cantas una canción y no te sabes la letra, me gusta cuando te ríes de mí o de mis manías, cuando me comparas con cualquier cosa y cuando preguntas por mí. 
Me gusta cuando no sabes qué decir, cuando te trabas al hablar, cuando llamas a los demás por mi nombre, cuando te despides con un beso y cuanto intentas ponerte serio. 
Me gusta cuando me pides algo, cuando cantas esa ridícula canción, cuando te enfadas porque me paso de lista y cuando me sonries con complicidad. Me gusta cuando intentas que todo te salga bien, pero sin duda, lo que más me gusta es quererte




7.21.2011

Me siento traicionada.

Si no lo sabes, pues me lo preguntas!
Luego quedo yo como la mala, claro.

¡Yo no te he dicho que dejes de hacerlo! !No te lo he prohibido!


Que sepas que me has decepcionado.


7.20.2011

¿A qué?

A la tristeza,
a tu resignación.
A ese vacío que nada llena,
a ese miedo de perderte que me frena,
a todo eso que me envenena.
A todas esas cosas que no quise o supe decirte,
a todo ese amor tuyo que llevo dentro
que explota por momentos, 
cuando te siento.
A todo eso pienso vencer.


By: Ignacio Barruetabeña

Y a ti, ¿cómo te sienta?


    No se como lo sientes tú, pero yo también puedo decirte lo mismo.
Decirte que sin duda alguna hay mejores que yo. Mas guapas, mas cariñosas, mas sinpáticas. Puedo decirte que si encuentras alguna te vayas con ella, puedo decirte que espero que te haga feliz, decirte que si de verdad vas a estar mejor a mi me dejes, sin darte pena. Porque sólo quiero lo mejor para ti.

    
    Pero también puedo decirte que de algo estoy segura.
Segura de que ella no podrá quererte como te quiero yo, no podrá adorarte de este modo, no podrá advertir hasta el menor de tus dulces movimientos, de esos gestos imperceptibles de tu rostro. Es como si solo yo tuviera el don de ver, de conocer el verdadero sabor de tus besos, el color real de tus ojos.
Ella no podrá ver nunca lo que yo veo. Ella, incapaz de amarte más que yo, incapaz de entenderte, de respetarte como yo lo hago.
Ella no se divertirá con esos tiernos caprichos.

7.15.2011

Viernes, 15 de julio.

          Hoy. Me parece que ambos sabemos que día es hoy. Pero no quiero definirlo con un número, como es el 15. No. Porque es mucho más que eso, ¿verdad? Se dice rápido, pero acabamos de hacer cuatro meses y ni me he enterado. ¡Cuatro meses! 


          Ahora quiero que eches un momento la vista atrás. Quiero que pienses cuántas veces te has enfadado, cuántas veces hemos discutido, cuántas veces te han entrado ganas de dejarlo o de colgarme el teléfono. Y dime, ¿cuántas te han salido? Porque al menos para mí el resultado es cero. ¿Te das cuenta? ¡Ni una sola discusión! 


          Pero ahora no quiero centrarme en esas cosas, que este es u día demasiado bonito. Aunque la verdad es que la inspiración se me ha esfumado (no sé si te has dado cuanta de que tú también te has ido). Y lo único que rebota en mi cabeza es que te quiero. No, que te amo, que te amo con locura. Y que no sabes qué pena me da que no estés aquí para celebrarlo, porque te devoraría a besos y hartaría de mimos.


          Quiero que me hagas honor y que te lo pases tan bien como lo haríamos juntos. Sonríe. Disfruta. Este es un gran día y quiero que lo aproveches, quiero que todo el mundo lo sepa para que se muera de envidia viendo lo afortunados que somos. 
¿Me harás ese favor? 

7.13.2011

32. Día 1 sin ti.

    Hoy me he despertado en mitad de la noche, pensando en ti. Y una vez más, he vuelto a mirar tu foto de mi mesilla. Te he susurrado que te quiero, que te amo, esperando poder notar tu sonrisa a tantos kilómetros de distancia.
    La verdad, me encuentro mejor que ayer. Tengo más ganas de salir, de distraerme un poco, porque la verdad es  que te estoy desgastando de tanto recordarte. Es cierto que me apetece quedar con alguien, ya sean mis amigas o los tuyos. Pero al pensar en fijar un hora y un lugar, ¡pumm!, apareces otra vez en mi mente.
    Tantos días estando juntos se hacen difíciles de olvidar, y cambiar la costumbre de estar siempre contigo es complicado. Una costumbre que por cierto ha sido la mejor que he adquirido en muchos años.
Ya fuese en tu casa o en la mía, en el cine, en un parque, o tumbados en la hierba, daba igual. Esa sensación increíble de tenerte a mi lado, esas miradas que tanto añoro, las que hacían que se parase el tiempo.

    En estos momentos sólo quiero adelantar el reloj, poner el tiempo a cámara rápida, ver cómo pasa todo velozmente a mi alrededor, y pararlo en el momento en el que vuelvas. Porque miro el calendario y me dan ganas de desmayarme de lo lejos que te veo.
Pero más tarde, pienso: "al menos, le veo". La idea de perderte no entra en mi cabeza, así que el saber que volverás le quita un deprimente tono gris a todo lo que pienso.
Te amo.

7.12.2011

Revíveme

  Han pasado 6 horas desde que te has ido.
Seguramente estarás entretenido en Paris, conociendo a tus nuevos compañeros o preocupado por las maletas y no perder el vuelo.
Pero yo... yo he cogido el autobús, el metro, y me he vuelto a casa.
Me he encerrado en mi habitación, no quiero salir ni ver a nadie.


¿Hace falta decir que te echo de menos?
Aunque, bueno, en realidad te he estado echando de menos semanas antes de esto.
Es más, a partir de aquella tarde que, en nuestra plaza, me dijiste que te marchabas, todas mis noches han sido diferentes.
Tumbada en la cama, después de colgar y habernos despedido con un "te quiero", me quedaba pensando:

Pensando 
en cómo iba a echar de menos nuestras conversaciones nocturnas, nuestras películas en el cine o en tu casa donde lo menos importante era la película en sí.
Tus besos de sabor café&caramelo, después de que me hubieses pagado a mi también mi helado.
Echaría de menos tus caras confusas cuando no entiendes
lo que te digo,
o tus pequeños gestos que sólo yo sé apreciar.
Tu poca puntería para las fotos y mi poca gracia para posar en ellas.
Todas nuestras bromas, que juntos nos gusta repetirlas y repetirlas cuando tenemos oportunidad.

Tu mano junto a la mía.
Tus ojos clavados en los míos.
Tus labios sobre los míos.
...


Recuérdame de vez en cuando, deja que tus recuerdos te invadan
la mente.
Revive el sabor de mi boca, revive mis caricias, mi sonrisa.
Sólo un poquito, no te pido más.


7.05.2011

Me gustaría contarte una cosa.


Quiero decirte que eres la cosita más importante de mi vida, la que llena cada segundo de aburrimiento con miles de tonterías y risas, la persona con la que más confianza tengo... Que eres tú, por lo que me he levantado cada día pensando que el sol brillaba en el cielo aunque en realidad estuviera lloviendo en la calle. Que me levanto cada día pensando que merece la pena vivir para compartir el mundo contigo. 

    Quiero gritarte que te necesito, cada segundo de cada hora de cada día. Quiero decirte que que todos los momentos que hemos compartido han significado para mi mucho más delo que han significado con nadie. Que siento por ti lo que no he sentido por nadie anteriormente.Que no puedo sustituirte, que significas demasiado en mi vida. 


    Quiero empezar diciendo lo grande que eres y lo mucho que significas para mi, para continuar diciendo que sin ti no podría estar. Quiero decirte tantas cosas... pero todo se resume en esto: te necesito, te echo de menos, me haces falta para vivir, eres mi vida... y ante todo: TE QUIERO, como no he querido a nadie, te quiero más de lo que nadie te querrá en su vida.


6.28.2011

Y así, de repente.

    Es extraño, que una persona aparezca en tu vida y lo cambie todo. Alguien del que no sabías nada, del que habías prescindido sin mayores problemas hasta ese momento y que sin embargo se apodera de ti, consiguiendo que a partir de entonces nada tenga 
sentido lejos de él.






6.17.2011

15.06.2011 Dos meses juntos.

    Aún recuerdo la primera vez que hablamos. Recuerdo cómo poco a poco fuimos cogiendo confianza, hablando sobre esto y lo otro, contándonos nuestras pequeñas cosas, nuestros pequeños problemas. Recuerdo cada conversación con piques y tonterías...
 
     Pero poco a poco, cuanto más y más hablábamos, fui enamorándome de ti sin darme cuenta. ¿Quién  lo diría? ¿Tú y yo? No sé qué pasó, la verdad. Te has convertido en pocos meses en el centro de mi vida, y sí, es así, te lo aseguro. Te quiero, y es algo que ni quiero ni puedo cambiar. Sólo tú haces que esté tan contenta, y que me sienta tan bien, hasta el punto de sentir que toco el cielo con un dedo.


    Solo pido que esto, si algún día tiene que acabarse, sea lo más tarde posible, porque en estos momentos eres lo único que necesito para ser feliz, contigo a mi lado lo tengo todo. Tengo a la mejor persona del mundo. ¿Qué más puedo pedir?

6.15.2011

A ti.


- Cierra los ojos.
+ ¿Por qué?
- Da igual, tu ciérralos.
+Bien, ya los he cerrado... ¿y ahora?
- Ahora imagínate lo que más feliz te haría. ¿Qué ves?
+ A ti.